La popularidad de los auriculares va en aumento, es un mercado creciente, pero si los niños, adolescentes o jóvenes adultos no aprenden a usarlos correctamente podrían poner en riesgo su salud auditiva futura.

Los auriculares son pequeños altavoces dentro de los oídos. Usados a volúmenes bajos y por cortos periodos de tiempo, no son perjudiciales, sin embargo, escuchar música alta tan cerca de tímpano puede causar pérdida auditiva permanente. Los sonidos fuertes dañan unas pequeñas células llamadas ciliadas que se encuentran en el oído interno, son las encargadas de transmitir el sonido al cerebro, en la medida que estás se dañan o desaparecen su audición empeora de forma irreversible.

Es muy habitual ver a jóvenes por la calle, en el metro, en el bus, haciendo deporte, con sus auriculares puestos, muchos nos comentan que es su forma de evadirse y pasar el tiempo. Lo que la mayoría desconoce es que escuchar música a volumen elevado y de forma muy continua, puede ser la causa de pérdida auditiva más adelante. Hasta hace unos años la pérdida auditiva inducida por ruido era un riesgo reducido a algunas profesiones, como la construcción. Pero los nuevos hábitos están haciendo que esto cambie, y cada vez más jóvenes muestran signos de pérdida auditiva inducida por el ruido. (Recientemente el jóven rapero Arkano, ha hecho público que padece acúfenos y como le está afectando a su vida cotidiana.)

Cada vez la exposición a ruidos es más elevada, trabajos ruidosos, eventos deportivos, conciertos, juegos, tráfico, a los que además se une el uso durante largos periodos de tiempo de los auriculares. Las primeras muestras de daño auditivo aparecen en forma de zumbidos en los oídos después de estar expuestos a ruidos fuertes y la amortiguación de sonidos.

La prevención es la mejor herramienta que existe para reducir el riesgo de daños causados por los auriculares:

1. Bajar el volumen. Este simple gesto le puede evitar sufrir problemas auditivos en el futuro. Si además acostumbra su oído a volúmenes más bajos en la televisión y otros dispositivos, estará protegiendo su salud auditiva.

2. Use auriculares con cancelación de ruido, esto evitará que tenga que subir el volumen en ambientes ruidosos, ya que su diseño limita los ruidos externos.

3. Descansar periódicamente de los auriculares puede ayudar a prevenir posibles pérdidas auditivas, desconectar los auriculares durante cinco minutos cada media hora o diez minutos cada hora, sería una buena medida preventiva.

4. No supere el 60% del volumen máximo de su dispositivo y realice pausas para dejar descansar el oído. Algunos dispositivos permiten establecer unos límites de volumen, si es su caso sería una buena recomendación configurar su dispositivo para que no sobrepase el límite establecido.

5. Una forma de averiguar si el volumen de sus auriculares es elevado es preguntar a los que le rodean si escuchan su música, si es así, sepa que está dañando su audición.

6. Atención a otros riesgos, cuando el volumen de la música ahoga el resto de sonido no solo está en peligro su audición, el riesgo de sufrir un accidente por no escuchar las señales de alerta del tráfico se multiplican.

    

Un futuro cercano

Como bien nos recuerda el audiólogo Jan Mayes de Healthy Hearing “si los niños pequeños usan auriculares, podrían tener problemas para entender el habla en lugares ruidosos desde la adolescencia hasta principios de los veinte años”.

La Organización Mundial de la Salud estima que alrededor de la mitad de la población entre los 12 y 35 años está en riesgo de daños auditivos inducidos por ruido. El cuidado, la prevención y las revisiones anuales de la audición son los elementos a su alcance para mantener una buena salud auditiva.

Centros Auditivos Aurisen les invita a una revisión auditiva gratuita.