Pruebas auditivas ¿Cómo se mide la pérdida auditiva?
Las pruebas auditivas tienen como finalidad verificar la capacidad de una persona para escuchar sonidos de diferente tono y volumen. Los audiólogos registran los resultados de estas pruebas de audición en un gráfico denominado audiograma. Los valores que resultan plasmados en el audiograma ayudan a identificar la gravedad y las posibles causas de los problemas de audición.
Entre las pruebas auditivas se encuentra la audiometría de tono puro, uso de un audiómetro y pruebas de discriminación del habla. Para evaluar la audición en bebés y niños hay pruebas específicas para ello.
Cómo oímos
El sonido se transmite por el aire mediante vibraciones que generan ondas sonoras. De forma que una vibración suave genera un sonido suave, al tiempo que una vibración grande crea un ruido fuerte. El volumen de los sonidos se mide en decibelios (dB). El tono o la frecuencia de un sonido se establece en función del número de vibraciones por segundo, y se mide en hercios (Hz).
Un sonido de baja frecuencia se produce por las vibraciones lentas, mientras que sonidos de alta frecuencia son originados por vibraciones rápidas.
Indicios que indican que necesita una prueba de audición
Algunas señales que pueden indicar que necesita una revisión auditiva:
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Tiene sensación de un zumbido en los oídos.
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Su familia se queja de que ve la televisión a un volumen demasiado elevado.
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Con frecuencia tiene que pedir que le repitan lo que dicen.
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Las demás personas le dicen que habla demasiado alto.
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Le cuesta escuchar conversaciones, sobre todo cuando hay ruido ambiente.
Tipos de pruebas auditivas
Existen diferentes tipos de pruebas de audición, pero en su mayoría incluirán:
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Audiometría de tono puro: Es una prueba auditiva básica que se realiza para determinar los sonidos más suaves que la persona puede escuchar en deferentes tonos o frecuencias. Esta prueba se realiza por un audiólogo, en una cabina insonorizada. Un audiómetro produce una seria de pitidos y silbidos (tonos puros) y la persona que se está realizando la prueba presiona un botón cuando escucha los sonidos.
La audiometría se puede utilizar usando auriculares, con lo que se estaría probando la audición de conducción de aire. También se puede colocar un vibrador sobre el hueso mastoideo, de forma que el sonido llegará a través del conducto óseo, de esta manera se miden los sonidos que pueden escuchar las vías auditivas internas.
Los resultados de la prueba indican si la audición es normal o si existe algún tipo de pérdida auditiva, que puede variar de leve a profunda. Mediante la audiometría también se determinará si la pérdida es conductiva, es decir, si el problema está en el oído medio, o neurosensorial, lo que indicaría que el problema se encuentra en el oído interno o en el nervio auditivo.
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Pruebas de discriminación del habla: esta prueba mide la claridad con la que escucha el habla. Para ello deberá repetir las palabras que le dicen. La pérdida auditiva relacionada con la edad se denomina presbiacusia, suele comenzar con la pérdida de las frecuencias más altas, por lo que, sonidos del habla como ‘p’, ‘f’ y ‘t’ sonarán muy similares.
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Prueba de audición en línea: con esta prueba usando auriculares se verifica la audición con ruido de fondo. Su duración es de menos de cinco minutos y mide la capacidad auditiva según la edad.
Pruebas auditivas para bebés y niños
Algunos bebés pueden tener mayor riesgo de problemas auditivos. El nacimiento prematuro, bajo peso al nacer o ictericia son factores de riesgo, entre otros. Las pruebas que se utilizan dependerán de la edad de los niños, pero suelen incluir las siguientes:
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Las pruebas objetivas, se suelen utilizar con bebés menores de seis meses, porque no requieren una respuesta del oyente. Entre ellas estarían las pruebas de emisión otoacústica, las pruebas de respuesta auditiva del tronco encefálico, la electrococleografía y la inmitancia acústica.
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Audiometría de observación conductual, consiste en hacer ruido cerca del bebé y observar su respuesta. Esta prueba se puede usar en bebés menores de siete meses.
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Orientación de refuerzo visual, se enseña al bebé a mover la cabeza hacia el sonido asociándolo con un estímulo visual. El bebé moverá la cabeza hacia el sonido para poder ver el estímulo visual, de esta forma se podrá medir su respuesta a diferentes sonidos.
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Reproducir audiometría. Para niños mayores se les enseña mediante un juego a responder a los sonidos, como dejando caer una canica cada vez que escuchen el sonido.
Pruebas auditivas objetivas
Las pruebas auditivas objetivas incluyen:
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Prueba de emisión otoacústica: se utiliza para verificar la función de los pelos ciliados en la cóclea. Estos pequeños pelos producen un débil sonido como respuesta al sonido, que se denomina emisión otoacústica.
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Prueba de respuesta auditiva del tronco encefálico: la prueba consiste en colocar electrodos en la cabeza para medir las ondas cerebrales. Se utiliza para verificar la actividad eléctrica en el cerebro como respuesta a un sonido.
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Electrococleografía: Consiste en pasar un electrodo a través del tímpano para tocar la cóclea, con el fin de detectar signos de actividad eléctrica en respuesta al sonido.
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Inmitancia acústica. Se utiliza para evaluar la integridad y función del sistema del oído medio. Determina la movilidad del tímpano, la función de la trompa de Eustaquio, el umbral del reflejo acústico y la movilidad de la cadena de huesecillos. La inmitancia acústica consta de dos partes: timpanometría y prueba de reflejo acústico.
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Timpanometría: esta prueba se utiliza para verificar si el tímpano puede moverse con normalidad. La timpanometría ayuda a evaluar el oído externo, medio y la trompa de Eustaquio. Se realiza insertando una sonda suave en el oído, a través de la cual se introduce aire, de forma que modifica los niveles de presión lo que provoca que el tímpano se mueva.
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La prueba del reflejo acústico: cuando el oído recibe un sonido fuerte se produce un endurecimiento del tímpano por la contracción del músculo estapedio en el oído medio. La prueba del reflejo acústico consiste en determinar el nivel de intensidad más bajo al que se produce el endurecimiento del músculo estapedio. A este nivel se le denomina umbral del reflejo acústico. Esta prueba aporta información sobre la gravedad de la pérdida auditiva y su posible causa.
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Fuentes: